Continuando con los Objetivos de Desarrollo Sostenibles, en este articulo nos adentraremos en el análisis y comprensión del punto 2. Abordaremos este objetivo desde una perspectiva práctica, con el propósito de facilitar su implementación en nuestras unidades didácticas.
Es fundamental comprender y aplicar estrategias concretas que contribuyan a alcanzar este objetivo específico, lo cual implica explorar diversas acciones y enfoques prácticos que puedan integrarse en el diseño y desarrollo de actividades educativas.
El hambre extrema y la desnutrición continúan siendo un enorme obstáculo para el desarrollo sostenible. La mala alimentación es además un caldo de cultivo para que las personas sean más propensas a sufrir enfermedades
Contenidos
El Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 2 es erradicar el hambre, lograr la seguridad alimentaria y mejorar la nutrición, así como promover la agricultura sostenible.
Nuestra manera de alimentarnos es ambientalmente insostenible, ya que el daño que produce a la tierra y a sus recursos es cada vez mayor e irreversible. Urge un cambio radical en nuestro sistema alimentario.
Nuestros hábitos de consumo forman parte del sistema alimentario global y, por tanto, cada vez que decidimos qué comer, también elegimos cuidar o no nuestro planeta, cuidar o no a las personas más vulnerables.
Tenemos el compromiso de garantizar a las generaciones futuras una tierra fértil y en equilibrio, capaz de satisfacer sus necesidades alimentarias, y para ello necesitamos llevar a cabo cambios radicales.
Te sugerimos varias propuestas:
Enseñar a niños la importancia de una alimentación saludable es imprescindible. Resulta interesante realizar actividades donde identifiquen diferentes grupos de alimentos, aprendan sobre la importancia de cada uno de ellos y cómo deben combinarse para una dieta equilibrada.
Llevar un control de desayunos saludables, en los que se potencie el consumo de alimentos variados cada día de la semana, es una forma de hacerlo que suele ser motivadora.
Desarrollar actividades que ayuden a los niños a comprender el impacto del desperdicio de alimentos en el mundo y en sus propias comunidades. Dos actividades que os sugerimos:
Organizar tareas para calcular la cantidad de alimentos que se desperdician en sus hogares o en la escuela y discutir formas de reducir este desperdicio (debate filosófico). A continuación, elaborar un plan personal y grupal para una semana en el que el objetivo sea “Cero alimentos a la basura”.
Los alumnos llevarán un cuaderno de registro:
Se analizarán los alimentos que se tiran, buscando alternativas para reutilizarlos (como abono para el huerto, montando una planta de compostaje en el colegio...).
Actualmente existen aplicaciones en las que diferentes empresas de alimentación ofrecen alimentos que van a tirar a la basura, porque al día siguiente tienen que sacar productos frescos, a precios muy bajos. Suelen ser lotes de comida de panaderías, verdulerías, etc., en los que no es posible elegir lo que se adquiere, pero el precio es muy reducido.
La clave está, entre otras cosas, en saber adaptarse a la oferta y en acomodar nuestro plan nutricional de la semana a esos alimentos que vamos a obtener a bajo coste. Esta actividad puede ser muy atractiva para el alumnado, puesto que incorpora la tecnología. Hay que tener en cuenta que será más viable llevarla a cabo en ciudades grandes o medianas, en las que sea factible recoger los productos del establecimiento o establecimientos en cuestión.
Realizar actividades que promuevan la conexión de los estudiantes con la naturaleza y la importancia de la agricultura sostenible:
Involucrar a los alumnos en proyectos que ayuden a combatir el hambre. Podrían, por ejemplo, organizar una colecta de alimentos para donar a un banco de alimentos local o participar en la creación de un programa de alimentación para personas necesitadas en su localidad.
Se puede organizar una campaña a la que pondremos un nombre. Sería una actividad muy recomendable el que los alumnos de 4º se distribuyesen para exponer los objetivos de la campaña al resto de sus compañeros del centro, de esta forma comunicarán con más cercanía y conseguirán motivar mejor para que todos se adhieran al proyecto.
Esperamos, una vez más, que están propuestas te resulten útiles para tu unidad didáctica.